martes, 19 de abril de 2011

Nítidos detalles




Una admirable ilusión
una entrañable promesa
unos ojos la mar de bonitos
una boca que dice palabras que alientan
que anuncia sueños de impaciencia
una hermosa mata de pelo en rubia melena
un porte esbelto, canónico, que quita el hipo
un perfil antológico
como el de una diosa griega
una sonrisa incitante, limpia, sincera
una mirada que habla sin palabras…

Son los atributos y gracias de una muchacha
que le tiene cortado el aliento
a un muchacho que la observa prendado
con admiración y anhelos,
con respeto y entusiasmo
porque le ejerce una influencia de impacto,
porque muy adentro le vibran los sentidos.

Un roce de dos cuerpos que se acercan
un beso de cuatro labios que se queman
un abrazo estrecho como de amantes
dos pechos cálidos que se entregan
dos corazones briosos, galopantes
que laten al unísono, con los mismos compases
la atracción de dos que se quieren
en una aproximación desbordante
por pareja de puntos en ideal encaje
dos almas que se compenetran
porque entre ellas el amor es muy grande.

Una relación preciosa, admirable
de una pareja que se complementa
de una manera envidiable.

Si entiendes el mensaje de este poema
descubrirás en sus nítidos detalles
que habla de nuestra experiencia
de cuando el mundo era nuestro
de cuando no existía en la tierra,
ni por asomo, un amor más leal
que el que tuvimos al salir de la adolescencia,
un amor que era solo cariño, solo verdad.
J.Teodoro, Abril'2011

jueves, 7 de abril de 2011

Ni cenizas siquiera


Con el tiempo el amor se confirma
porque su alimento diario
le hace crecer robusto,
optimista, lustroso, sano…

Con el roce y el trato cercano
se liman las asperezas agudas
para hacer más suave el contacto
mientras se despeja todo tipo de dudas.

Se toleran los defectos,
se exaltan las cualidades
se consensuan los proyectos
y las relaciones se tornan estrechas y amigables.

Cuando la empatía toma cuerpo,
cuando se asume con entereza y decisión
que el amor es cuestión, no de uno más uno sino de un dueto,
se acortan las distancias y se aumenta la conexión.

Si se da el caso de un amor superficial
que se cultiva poco,
se enaltece la dualidad
para acabar en un mundo de locos.

En los supuestos más dispares
también puede salirse adelante
luchando en un frente constante
cediendo terreno sin desanimarse.

Acuerdos y renuncias
son los ingredientes del triunfo
para evitar que cualquier minucia
evite poder continuar juntos.

La comprensión, el cariño, la voluntad
fueron componentes de una buena relación,
elementos de importancia capital
que supieron cuidar y compartir los dos.

Solo les faltaba la continuidad
que ya estaba programada
para lo que tenían disponibilidad
y un largo camino que a ninguna parte llevaba.

Los árboles frondosos
que estaban a los lados de las cunetas
han sido talados todos
para ser convertidos en leña.

Con las ramas se hizo una gran candela
de la que no quedan rescoldos…,
ni las cenizas siquiera,
que de todo aquello den testimonio.
J.Teodoro, Abril'2011

martes, 5 de abril de 2011

Un fuerte meco











Quisimos empezar
uniendo en una vida nuestras vidas;
quisimos navegar
por las olas movidas
de aguas que nos eran desconocidas.

Fuertes nos enfrentamos
a un futuro en buena parte incierto,
para lo cual fletamos
nuestro barco en el puerto
zarpando a singlar por un mar abierto.

Muchas veces el viento
nos obligó a desviar nuestro rumbo
buscando el barlovento
para evitar el tumbo,
pues zozobrar tiene duro gachumbo(1).

Buscando favorables
vientos, que son los que calman la mar
hicimos navegables
las jornadas sin par
conjugando juntos el verbo “amar”.

Hacemos travesía
con manejo experto de nuestra nave;
nuestro amor cada día
marcha mejor, si cabe,
sin tener un inconveniente grave.

Nuestro barco, varado
lleva mucho tiempo en el dique seco
(¡con lo que ha navegado!),
porque hay algún fleco
que ha dado al velamen un fuerte meco (2).


(1)Gachumbo: Cáscara dura de algunos frutos. Por extensión, cosa difícil.
(2)Meco: Golpe
J.Teodoro, Abril'2011