viernes, 20 de marzo de 2009

Una lágrima de orgullo

Una lágrima de orgullo
Siempre me ha acompañado
aquella lágrima que me lloraste
por aquel beso educado
que tú me regalaste
por mi amor declarado que aceptaste.

Lágrima que rozó
mis labios jóvenes y temblorosos
y que significó
uno de los hermosos
de ti para mí, momentos honrosos.

La lágrima de orgullo
que todavía altera mi entereza
pues fue como un capullo
que con delicadeza
me entregaste en prueba de grandeza.

Porque era para mí
un gesto generoso por tu parte,
el cual yo recibí
dispuesto para amarte
con la intención de, jamás olvidarte.

Lágrima cristalina,
perla transparente de mi emoción,
piedra preciosa fina,
joya de mi pasión,
tesoro guardado en mi corazón

El Puerto de Santa María, Marzo'2 009
José Teodoro Pérez Gómez