La llavee
En estas fechas en las que el alma se enternece
me gustaría dar rienda suelta al pensamiento
y demostrarte que te tengo buen sentimiento
que siempre es menor del que tu persona merece.
Quisiera observar cómo en el tiempo permanece
el afecto, el cariño en nuestro comportamiento
y que nuestros desencuentros se los lleve el viento
si es que alguna vez tuvimos algún que otro trece.
Que te encuentres en medio de quienes bien te quieren,
que la paz sea tu forma normal de vivir
y puedas transmitírsela a quienes te rodean.
Que siendo las circunstancias aquellas que fueren,
el Niño te traiga la llave con que abrir
las puertas del corazón a quienes en ti crean.
Que disfrutando las cosas que nos entretienen
sepamos ser generosos para compartir
con aquellos que menos afortunados sean.
Autor: José Teodoro Pérez Gómez
J.Teodoro,(13.12.2010), Dic.'2011
martes, 20 de diciembre de 2011
domingo, 11 de diciembre de 2011
Como cualquier niño
(Zéjel Navideño)
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
El Niño nace modesto
entre animales y aperos
en una noche de truenos
en unas pajas de trigo.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
María tiene esperanzas
y hace al Niño la cama;
Él solo mira su cara,
José busca algo de abrigo.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
Pronto romperá el Alba
y apuntará la mañana,
María está cansada,
hace un ratito ha parido.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
José dice a la Virgen.
déjame que yo lo cuide,
descansa en estos mandiles,
no hay otra cosa cariño.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
María aguanta y resiste
pero el sueño le rinde,
José su buen marido
con su manto la reviste.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
María descansa un rato,
José recoge el hato
para aparejar el asno,
hay que emprender el camino.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
El Niño ajeno a todo
abre sus grandes ojos
riendo guapo, precioso
como hace cualquier niño.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
J.Teodoro (22.10.2 008), Dic.'2011
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
El Niño nace modesto
entre animales y aperos
en una noche de truenos
en unas pajas de trigo.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
María tiene esperanzas
y hace al Niño la cama;
Él solo mira su cara,
José busca algo de abrigo.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
Pronto romperá el Alba
y apuntará la mañana,
María está cansada,
hace un ratito ha parido.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
José dice a la Virgen.
déjame que yo lo cuide,
descansa en estos mandiles,
no hay otra cosa cariño.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
María aguanta y resiste
pero el sueño le rinde,
José su buen marido
con su manto la reviste.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
María descansa un rato,
José recoge el hato
para aparejar el asno,
hay que emprender el camino.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
El Niño ajeno a todo
abre sus grandes ojos
riendo guapo, precioso
como hace cualquier niño.
En esta noche de frío
el Redentor ha nacido
en un pesebre sencillo.
J.Teodoro (22.10.2 008), Dic.'2011
Suscribirse a:
Entradas (Atom)